El actual alcalde insiste en que, si hubiera querido sacar rédito electoral, las hubiera inaugurado en el mes de abril.
El candidato popular y actual alcalde de Guadix, Santiago Pérez, ha recordado esta mañana que las obras municipales que el Ayuntamiento ha impulsado no paran. Así, van a comenzar las obras en la Barriada Federico García Lorca y siguen actuando en la última fase del Plan Urban con San Miguel, Cañada de los Perales y Cuatro Veredas.
Según Santiago Pérez, «el que sigamos con las obras va a servir y se va a aprovechar, por parte de otros grupos políticos, para hacer política destructiva. A los ciudadanos les digo que para hacer obras, primero hay que tener recursos y proyectos y nosotros hemos conseguido ambas cosas. Las estamos ejecutando para mejorar su calidad de vida. Esto crea incomodidades, pero merece la pena crearlas, antes que no tener ningún proyecto que desarrollar como sucedía antes». Al respecto, Pérez López ha hecho hincapié en el hecho de pedir «comprensión a los vecinos. Estas obras se están haciendo para mejorar su calidad de vida y la planificación municipal se ha hecho no pensando en las elecciones, sino pensando en ellos. Si nosotros hubiéramos pensado en las elecciones, hubiéramos terminado todas las obras en el mes de abril, las hubiéramos inaugurado a bombo y platillo, hubiéramos sacado una gran rentabilidad electoral, pero también es verdad que cientos de personas tendrían que estar en sus casas, porque no podrían estar trabajando».
Santiago Pérez ha preferido «que la gente siga trabajando unos meses más en estas obras, antes que nosotros inaugurarlas y ponernos la medalla. Las obras van a seguir a su ritmo, vamos a continuar haciendo obras porque ahora se ha aprobado un proyecto para remodelar la plaza de Santo Domingo y primera fase del Real de Santo Domingo. Y también estamos ultimando para hacer el proyecto de 1 millón de euros entre Cañada de los Perales y la zona de Cuatro Veredas pasando por Barranco del Armero». Por último, Pérez López ha vuelto a pedir disculpas a los vecinos y «lo hemos hecho porque la gente siga trabajando, ya que la situación está muy mala. No nos parecía decente terminar la obra en tiempo récord y, sin embargo, que la gente estuviera en su casa con los brazos cruzados sin tener dónde ir».