Escrito por J.J.PÉREZ
Jueves, 01 de Abril de 2010 22:08
El frío acompañó a los nazarenazareno-guadixnos de los Favores en los últimos metros de su recogida la noche del Miércoles Santo. Se cerraban las puertas de Santo Domingo y se abrían con las llaves del Nazareno las de los días centrales de la pasión accitana.
El temor que la imagen del Nazareno infundió a los soldados napoleónicos en 1810 se convierte 200 años después en el amor que los accitanos profesan a esta imagen, que todos los años visita la clausura de monjas clarisas del convento de Santiago para recoger sus llaves. Este año los encargados de imponer las llaves a la imagen han sido Miguel y Norberto Ochoa, padre e hijo.
Para Miguel Ochoa, durante 14 años hermano mayor de esta Hermandad, recoger las llaves del convento es el honor más grande que pueda imaginar un miembro de esta corporación. Aunque es un instante fugaz, es aún más importante para un cofrade que el haber sido hermano mayor, declara. Este año Miguel contempló cómo su hijo Norberto accedía a la parte superior del paso para completar la importantísima misión que le habían encomendado sus hermanos.
La cuadrilla de costaleros de Nuestro Padre Jesús Nazareno marchó en los primeros instantes con los sones de Requiem en recuerdo de todos los hermanos fallecidos e interpretada por la banda del Cristo de la Expiración de Huéscar. En la igualá de este año había dos huecos importantes: Eran los que han dejado para siempre Jesús Medialdea y Amador Gilbert.
Estrenos
La hermandad estrenaba este año las terminaciones de la cruz y las potencias del Señor obra de los talleres de Villarreal. Jesús Nazareno se presentaba en Guadix de la forma más clásica posible sobre un calvario de clavel rojo con centros de iris morado.
Ayer pudo verse el trabajo, del vestidor José Manuel Lozano, que realizó una obra de filigrana con encaje y alfileres para presentar la belleza del rostro de María Santísima de las Lágrimas ante sus cientos de devotos que un año más se arremolinaban en las cercanías de la iglesia de San Agustín.
Las parejas de nazarenos y camareras del amplio cortejo penitencial cruzaron el portalón azul escuchando, de la mano de la Banda Municipal de Atarfe, la marcha ‘Amarguras’. El palio, vestido de rosa blanca achampanada, salió a la calle con la marcha ‘Reina de las Lágrimas’ compuesta para el 50 Aniversario de la corporación nazarena por Martín Soler. Este año, por primera vez, un grupo de hermanos se quedaba en el interior de la capilla orando a Jesús del Soberano Poder, su titular cristífero, bendecido el pasado 12 de septiembre por el obispo de Guadix, Juan García-Santacruz.
Al cierre de esta edición estaba previsto que el Cristo de la Luz iniciase desde la iglesia de Santiago la procesión del silencio que abre el Viernes Santo accitano. Desde la iglesia de San Torcuato saldría a la una y media de la madrugada la imagen de Jesús de la Obediencia.
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