Miguel Ríos comparte con el público accitano anécdotas de su carrera recogidas en el libro “Cosas que siempre quise contarte”

Miguel Rios
Miguel Rios

Miguel Ríos comparte con el público accitano anécdotas de su carrera recogidas en el libro “Cosas que siempre quise contarte”

El Aula Abentofail de Poesía y Pensamiento tuvo que mudar en su sesión de octubre su ubicación habitual en el Patio del Ayuntamiento y trasladarse al Teatro Mira de Amescua, que se llenó de público de todas las edades interesado en disfrutar de la intervención de su invitado número 119: Miguel Ríos. Fue una velada entrañable en la que el granadino, una de las voces más reconocidas y reconocibles del panorama musical nacional, compartió anécdotas de su carrera y de sus primeros pasos musicales en Madrid. Muchas de ellas recogidas en su libro “Cosas que siempre quise contarte”, del que firmó numerosos ejemplares una vez finalizada su intervención. Hubo ocasión además de establecer un debate entre público e invitado sobre el estado de la cultura en la provincia de Granada. Miguel Ríos estuvo acompañado en la mesa por la alcaldesa accitana, Inmaculada Olea Laguna; el director del Aula Abentofail, Antonio Enrique; y el doctor Luis Asenjo.

GABINETE DE PRENSA. AYUNTAMIENTO DE GUADIX.
3 de noviembre de 2015.

Miguel Ríos, invitado del mes de octubre en el Aula Abentofail de Poesía y Pensamiento

El Aula Abentofail de Poesía y Pensamiento contará en su sesión de octubre con la participación de un granadino de excepción: Miguel Ríos, que presentará ante el público accitano “Cosas que siempre quise contarte”. La cita es, como siempre, el último viernes del mes (el próximo 30 de octubre) a partir de las ocho de la tarde en el patio del Ayuntamiento de Guadix con acceso libre para todo el que desee asistir. Será una ocasión única para conocer de cerca a Miguel Ríos y participar en el espacio de coloquio que se abre al final de su intervención con la coordinación del director del Aula Abentofail, el escritor Antonio Enrique. En esta ocasión el acto será presentado por el escritor, doctor Luis Asenjo.

El Aula Abentofail de Poesía y Pensamiento es una iniciativa de la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Guadix, representada por Rosana López Raya, dirigida y coordinada por el escritor Antonio Enrique. Iniciada en 1999, el Aula se ha mantenido durante todos estos años como referente no sólo a nivel local, sino también provincial. Miguel Ríos será el invitado 119 de este Aula por la que han pasado grandes referentes de la literatura, la poesía y la cultura nacional.

Más datos sobre Miguel Ríos
Nace en Granada en 1944, menor de siete hermanos, en cuyo barrio de la Cartuja vivió de niño y estudió en los Salesianos de la plaza del Triunfo. De joven trabajó en unos grandes almacenes del centro de la ciudad, en su departamento de discos. Aquí despertaron sus ansias musicales de vocalista. Se presenta a un programa de radio Granada, graba una cinta mostrativa, y así comienza su historia. Eran comienzos de los 60. Desde entonces acá, su carrera no ha conocido declive. Temas como “El río” o “Vuelvo a Granada” o “Bienvenido” han quedado en el imaginario colectivo, así como la adaptación por Waldo de los Ríos del “Himno a la alegría”, del que llegaron a venderse siete millones de copias, situándose en la cabecera de éxitos de numerosos países.

A finales de los 70, grabó “Los viejos rockeros nunca mueren”, al que siguieron temas como “Santa Lucía”, que colocaron al rock español en la esfera internacional más exigente. En los 80 abre su conexión al mundo iberoamericano con conciertos multitudinarios en ambos mundos y en los 90 tuvo lugar la más espectacular de sus giras: más de quinientos mil espectadores le acompañaron en 34 conciertos por toda España. A comienzos de siglo, siguió prodigando sus encuentros con la música, hasta su disco último, “Solo o en compañía de otros”, en 2008. Desde entonces, colabora incansable con organizaciones solidarias mediante conciertos altruistas.

Dos veces premio Ondas, premio Latin Grammy a la Excelencia, premio de honor de la Academia de la Música, Medalla de Oro de la ciudad de Granada, Medalla de Oro al Mérito en Bellas Artes, Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo, Medalla de Oro de Andalucía, e Hijo Predilecto de Andalucía, entre otras distinciones, a este hombre afable y entusiasta que nunca desmintió la humildad y el decoro de sus orígenes le quedó humor para publicar sus memorias: Cosas que siempre quise contarte (2013), que es un libro donde se acumula la nostalgia. El acto será presentado por el escritor, doctor Luis Asenjo.

Un texto de Miguel Ríos
Llegué a Madrid una fría mañana de otoño. La estación de Atocha me pareció gigantesca, inquietante, hostil. El hollín ennegrecía la cubierta de hierro y cristal por la que se colaba la sucia luz de la mañana y en la que rebotaba el estridente sonido de los frenos de los trenes que a esa hora llegaban del sur. Un sentimiento penoso me sobrevino cuando me vi tan pequeño en aquel espacio inmenso. Asustado e indefenso ante la naturalidad de la gente habituada al trasiego de la estación, disimulaba mi cortedad pueblerina imitando los gestos de los más duchos, los mejor trajeados. Aferrado a mi maleta, seguí los pasos anónimos que me llevaban a la salida, y no la solté hasta que estuve en mi cuarto.
Doña Leonor me recibió con su bondad habitual y compartí habitación con mi amigo Manolo, en un mueble cama, ya que la pensión estaba a tope. Madrid mostraba una cara muy diferente a la de mi anterior visita. Había muchísima gente por todas partes y en las calles el tráfico era caótico, nada que ver con la ciudad apacible y razonable del último verano, cuando los vagones del metro iban semivacíos. Ahora, en el hormiguero en que se convertía la estación de Sol, la muchedumbre me llevaba en volandas, apretujado como sardina arenque hasta dentro del vagón en el que tenía que luchar para llegar a la puerta antes de que se me pasara la estación de Delicias. Me costó acostumbrarme al bullicio, a la sinfonía desafinada de cláxones, al chirrido de los tranvías, al aceite refrito de los puestos de gallinejas, al frío y a la lluvia que prolongaban el invierno y hacían que la gente pareciera de mala leche, a que todo fuera tan caro que me impidiera siquiera desearlo.

De Cosas que siempre quise contarte, págs. 67-68.

GABINETE DE PRENSA. AYUNTAMIENTO DE GUADIX.
19 de octubre de 2015.

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