Ha solicitado entrevista con las diferentes administraciones responsables y ha elaborado una moción que se estudiará en el pleno de diciembre
El alcalde de Guadix, José Antonio González Alcalá, ha comparecido esta mañana arropado por los concejales del Equipo de Gobierno ante la puerta de la Administración en Guadix de la Agencia Tributaria para dar cuenta de las diferentes acciones emprendidas este fin de semana tras tener conocimiento el viernes a última hora de la posibilidad de reestructuración que podría suponer la desaparición de la actual administración. Según ha detallado, se ha elaborado una moción de alcaldía que se estudiará en el pleno de este mes de diciembre, al tiempo que se han solicitado ya entrevistas con las diferentes administraciones responsables para aclarar la situación y se han iniciado algunos contactos a lo largo del fin de semana.
“Aunque todavía no hay nada definitivo, no vamos a permitir que en Guadix se desmantelen este tipo de servicios que han hecho de ella un referente como ciudad media. Quiero que la ciudadanía esté tranquila porque estaremos siempre defendiendo los intereses de Guadix, con independencia del color político. Por eso pido solidaridad y compromiso al resto de administraciones y grupos políticos en la defensa de estos intereses”, ha afirmado González Alcalá.
Y es que, según ha explicado, el viernes a última hora recibía la visita del delegado provincial de la Agencia Tributaria en Granada, Francisco Ruiz, quien le informaba de la posible reestructuración de este servicio a nivel nacional y, por consiguiente también provincial, que conllevaría la desaparición de la actual delegación de la Agencia en Guadix, convirtiéndola en un punto de información y atención al usuario.
Tan sólo conocer la noticia, el alcalde y su Equipo de Gobierno iniciaron una serie de acciones dirigidas a reclamar el mantenimiento de la Administración en Guadix. De hecho, el mismo sábado se solicitaron reuniones con el subdelegado del Gobierno en Granada, Santiago Pérez López; con la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo; con el Secretario de Estado de Hacienda de la Agencia Estatal de Administración Tributaria, Miguel Ferre Navarrete; y con el Ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro.
Por otro lado, esta misma mañana se ha registrado una moción de alcaldía que se debatirá en el pleno de este mes de diciembre y que propone un único acuerdo: “instar al Gobierno de España y, en especial, al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, el que permanezca en Guadix la Adminstración de la Agencia Tributaria, cuya atención deriva en beneficio de toda la comaca accitana desde 1986, y dar traslado de los acuerdos adoptados al Subdelegado del Gobierno en Granada, Delegado del Gobierno en Andalucía, al Secretario de Estado de Hacienda de la Agencia Estatal de Administración Tributaria y al Ministro de Hacienda”.
Como complemento a estas acciones, a lo largo del fin de semana el alcalde ha mantenido ya contactos con el Presidente de su partido a nivel provincial, Sebastián Pérez, y con el subdelegado del Gobierno en Granada, Santiago Pérez López, a quien ha agradecido que esté empujando en la misma dirección. “Vamos a mantener una actitud responsable e intransigente ante el Gobierno de la Nación en la reclamación del mantenimiento de este servicio haciendo una reivindicación que queremos que sea sin color político”, ha explicado.
Tal y como ha detallado el propio González Alcalá, y según se argumenta también en la exposición de motivos de la moción, “esta alcaldía quiere manifestar su disconformidad con tal medida, si al final se lleva a efecto, ya que supondría el desmantelamiento de un servicio arraigado en la ciudad de Guadix desde hace muchos años y que asiste no solamente a la ciudad sino a toda su comarca, en la que se incluyen 33 municipios del norte de la provincia de Granada, muchos de ellos muy alejados de la capital”.
El alcalde ha recordado además que este servicio de la Agencia Tributaria viene funcionando en su actual ubicación desde al año 1986. “Guadix y su comarca no pueden asistir impasibles a su desaparición, lo que llevaría a perder su condición de ciudad media tradicional, que resuelve en primera instancia los problemas tributarios, en este caso, de una población en torno a los 60.000 habitantes”.