La Justicia cierra la instrucción del caso con más de cien imputados por pagar a un funcionario de Tráfico y evitar el engorroso trámite del examen
22.04.10 – 01:56 – J. E. P. | JAÉN.
Carlos C.R. se encuentra en paradero desconocido. La Justicia no da con él. Lo confirman distintas fuentes vinculadas al caso de los carnés falsos, una de las causas judiciales más voluminosas que lleva la Justicia en Jaén actualmente y que se intentará llevar a juicio con prácticamente 110 imputados que sentar en el banquillo. Su pista se pierde en un centro de Barcelona, donde fue localizado hace ya muchos meses en relación con otra causa judicial que tenía abierta en los tribunales.
Carlos R.C., supuestamente, se dedicó a vender carnés de conducir por cantidades que iban entre 1.500 y 4.000 euros. Según la hipótesis de los investigadores, Carlos R.C., acuciado por su adición a las drogas, se hizo con las claves de varios compañeros de trabajo y comenzó a «fabricar» carnés, que vendía posteriormente. Sus clientes principales eran gentes con dificultades para sacarse el carné de conducir por lo legal. En 2007 la Guardia Civil descubrió en Guadix a una persona de la que se tenía constancia de que nunca se había sacado la licencia, pero que exhibía un permiso expedido en Jaén. No se trataba de una falsificación, sino de un documento perfectamente legal. Las pesquisas del Instituto Armado llevaron a determinar que ésta persona había comprado el carné a un funcionario de tráfico. Y que lo mismo había decenas de personas en varias provincias de Andalucía.
El mismo funcionario de Tráfico ya había sido condenado por un delito de malversación de caudales públicos (Audiencia Provincial, Sección Segunda) al realizar entre 2004 y 2005 transferencias simultáneas en las que se pagaban dos tasas aplicando una sola y dedicando el importe de la otra a su enriquecimiento personal, consiguiendo 2.424 euros en 55 transmisiones.
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