Mons. Ginés García Beltrán ya es obispo de Guadix. La celebración de consagración episcopal ha tenido lugar esta mañana, en la Plaza de las Palomas, en pleno centro de la ciudad accitana, que se ha visto abarrotado de fieles y en la que hasta el tiempo ha puesto de su parte. Más 4000 personas han asistido a la celebración, presidida por el Nuncio de Su Santidad en España, Mons. Renzo Fratini, y que ha sido concelebrada por una veintena de obispos y arzobispos, dos cardenales- Mons. Cañizares y Mons. Amigo- y unos 200 sacerdotes, de Guadix y de Almería. Participaban como obispos concelebrantes, el Arzobispo de Granada y los obispos de Guadix y Almería.
Primero habló Mons. García-Santacruz como obispo Administrador Apostólico. Presentó a la diócesis de Guadix como “una iglesia con sacerdotes ilusionados, una vida religiosa rica y un laicado comprometido”, a pesar de la dificultades por al que pasa hoy la evangelización,.
Mons. Renzo Fratini, en la homilía habló del triple ministerio del obispo –enseñar, regir y santificar-, que debe estar marcado por la fidelidad a Cristo y a la Iglesia. “No lo tengáis en poco por ser joven” decía el Nuncio a los sacerdotes de Guadix, refiriéndose a Mons.Mons. Ginés, e invitándolos a acoger al nuevo obispo como pastor. Y sobre la autoridad del obispo, dijo que debe ser ejercida con delicadeza y con solicitud amorosa.
Tras los ritos de consagración episcopal -en los que el nuevo obispo ha recibido el báculo, el anillo, la mitra y el encargo de anunciar y ser fiel al Evangelio- y, antes de terminar la Eucaristía, Mons. Ginés se ha dirigido a sus nuevos diocesanos con palabras de afecto y manifestando el deseo de servir a esta iglesia accitana. “Una Iglesia bimilenaria,” así ha definido a la iglesia de Guadix, de la que ha subrayado también su carácter apostólico, pues hunde sus raíces en los primeros años de la evangelización, con San Torcuato.
Mons. Ginés también ha tenido palabras de recuerdo hacia la Iglesia de Almería, en la que ha nacido y que ahora le ve partir, hacia su pueblo de Huércal-Overa y hacia su paisano el Cura Valera, al que se encomienda y del que desea que pronto lo pueda ver nombrado santo.
“Porque os quiero, os doy lo mejor que tengo: Cristo,” … “ cada día pido sabiduría y fortaleza para transmitiros con fidelidad lo que he recibido de la Iglesia”… “no quiero ser más que un servidor de Cristo, en comunión con la Iglesia, siempre en comunión con la Iglesia”… son algunas de las ideas que transmitió Mons. Ginés en un discurso en el que tuvo un recuerdo especial hacia “las familias que sufren necesidad, sobre todo ahora en tiempos de crisis” y para las que presentó a una Iglesia dispuesta siempre a ayudar.
Al terminar la celebración, el nuevo obispo recibió las felicitaciones y los saludos de los sacerdotes y los feligreses, en un “besamanos” en la catedral, donde Mons. Ginés se desplazó para tomar posesión de la sede.
Mons. Ginés García fue nombra do obispo de Guadix el pasado 3 de diciembre, después de que el Papa Benedicto XVI aceptara su renuncia por motivos de edad de que durante 18 años ha sido obispo de Guadix, Mons. Juan García-Santacruz, que ahora pasa a ser obispo emérito de la ciudad accitana.