En el día de ayer, Lunes 16 de Abril, comenzaba en la ciudad de Baza la XXI Semana de Teología, con el lema ”a los 50 Años del Concilio Vaticano II, el Don de la Iglesia al Mundo”. Se trata de una Semana que, año tras año, supone para nuestra ciudad un tiempo privilegiado de formación y de dialogo.
Este año se cumple el 50 aniversario de la inauguración del Concilio Vaticano II, un Concilio ecuménico de la Iglesia católica convocado por el Papa Juan XXIII, quien lo había anunciado ya el mes de enero de 1959. Este Concilio es uno de los eventos históricos que marcaron el siglo XX, de aquí la temática escogida para este año.
Fue el Concilio que contó con más representación de todos, con una media de asistencia de unos dos mil padres conciliares procedentes de todas las partes del mundo y de una gran diversidad de lenguas y razas. Asistieron, además, miembros de otras confesiones religiosas cristianas.
Se pretendió que fuera un” aggiornamento” o puesta al día de la Iglesia, renovando los elementos que más necesidad tuvieran de ello, revisando el fondo y la forma de toda la vida de la Iglesia, pretendiendo que existiera un diálogo con las distintas confesiones.
Y en la tarde a ayer, tuvimos entre nosotros a José Ramón Villar, Profesor Ordinario de Teología Dogmática, que imparte las materias de Eclesiología y de Teología Ecuménica en la Facultad de Teología de la Universidad de Navarra, de la que ha sido Decano. Su conferencia tenía el título de: “la Iglesia en diálogo: ecumenismo, religiones, increencia”.
El profesor José Ramón comenzó haciendo una introducción del contexto histórico que existía antes de que el Concilio Vaticano II fuese convocado. Continuó hablando de la primera Encíclica del pontificado de Pablo VI, “Eclesiam Suam”, ya que la temática principal de este documento trata sobre el mandato de la Iglesia en el mundo contemporáneo. Clarificó que la finalidad del Concilio, no era responder a un error de tipo doctrinal, como había ocurrido con los demás concilios a lo largo de la historia, sino que su última finalidad no era otra que abrir caminos de dialogo y hacer caer a todos en la cuenta de que, a pesar de las diferencias existentes entre las distintas iglesias, existen muchas realidades que nos unen.
A partir de este momento se centró, en los tres puntos descritos en el titulo de su ponencia: el diálogo de la iglesia con las demás confesiones religiosas, el dialogo con las otras religiones, y el dialogo con la increencia, que en tiempos del Concilio Vaticano II recibía el nombre de ateísmo.
Y todas estas explicaciones las hizo apoyándose en los documentos del Concilio, que tocan de forma detallada estos puntos. Terminó el profesor José Ramón invitando a los asistentes, que llenaban el salón de actos de la Casa de la Iglesia de Baza, a leer los documentos del Concilio Vaticano II, por la gran riqueza que ellos siguen encerrando para la actividad pastoral de la Iglesia de nuestro tiempo.
José Antonio Martínez Ramírez.
Arcipreste de Baza.