Manos Unidas de Guadix le da un destino solidario a las pesetas que aún conservamos en los cajones

Manos Unidas de Guadix le da un destino solidario a las pesetas que aún conservamos en los cajones

Las pesetas van a dejar de tener valor a final de año y, con Manos Unidas, podrían tener un último uso solidario

Manos Unidas de la diócesis de Guadix ha montado huchas en las parroquias accitanas para recoger las pesetas que aún conservamos en nuestros hogares y ayudar, así, a financiar el proyecto de desarrollo que se ha comprometido a financiar en África.

Se trata de darle un nuevo uso a esas pesetas que aún conservamos y que, dentro de dos meses, dejarán de tener valor, pues el Banco de España dejará de canjearlas por euros.

Manos Unidas las puede recoger y ellos se encargarán de cambiarlas, antes de esa fecha, para que vuelvan a tener un último uso solidario.

Las huchas se han instalado en las parroquias de la ciudad accitana, pero las monedas se pueden recoger en todas las parroquias.

También se pueden llevar a la delegación de Manos Unidas en Guadix, situada en los bajos del obispado, los martes, de 10 a 11 de la mañana.

Quienes tengan pesetas, deben saber que estas dejarán de ser aceptadas por el Banco de España a finales de año. Se estima que hay muchos millones de pesetas aún sin cambiar.

Algunas se podrán conservar como reliquia de otra época, pero las que no, se pueden llevar a Manos Unidas, que ellos se encargarán de darles un buen uso, el mejor.

Manos Unidas, con lo que se recoja, lleva a cabo proyectos de desarrollo en el Tercer Mundo.

La delegación de la diócesis de Guadix se ha encargado de financiar un proyecto en Burkina Faso de educación infantil y promoción de la mujer. Las pesetas que se recojan ayudarán a financiarlo.

Agradecimiento

Por otra parte, Manos Unidas de Guadix ha agradecido a todos los que participaron en la última chocolatada su colaboración. 

Y se lo gradecen tanto a los que aportaron los ingredientes con los que hicieron el chocolate  como a los que lo disfrutaron.

Lo que se recogió en aquella chocolatada va destinado a financiar el proyecto emprendido en Burkina Faso.

Antonio Gómez

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