El alcalde de Guadix celebra el Día del Árbol con los alumnos de 1º y 2º de ESO del IES Padre Poveda plantando un árbol en El Vivero

Día del árbolEl alcalde de Guadix, José Antonio González Alcalá, la concejala de Educación del consistorio accitano, Marina Sánchez, y varios de los concejales del Equipo de Gobierno han acompañado hoy a los alumnos y alumnas de 1º y 2º de ESO del IES Padre Poveda en el acto de celebración del Día del Árbol que han llevado a cabo en el Parque de El Vivero. Allí han plantado un árbol que, en palabras del alcalde accitano, “constituye un símbolo del aprendizaje en valores que se debe fomentar”. Los escolares han plantado después una serie de arbustos autóctonos en taludes del parque.

Tanto el alcalde de la ciudad como la concejala de Educación y el director del centro, José Pablo Serrano, han coincidido en destacar la importancia de llevar a cabo actividades como ésta que contribuyan a la sensibilización para la conservación del medio ambiente y el respeto a la naturaleza. “Los centros educativos deben ser también transmisores de valores, por lo que actos como el de hoy han de servir de ejemplo”, ha asegurado González Alcalá, quien ha aprovechado para agradecer a los centros educativos y a su personal docente la organización de este tipo de iniciativas.

Los escolares han tenido además ocasión de conocer la historia del parque en el que han realizado la plantación y el motivo de la elección de las especies que han plantado. Según han podido saber, antes de ser transformado en parque, El Vivero sirvió de escombrera. Parte de los escombros fueron vertidos desde la zona superior (desde el pinar), tapando parcialmente el cantil formado por la rambla.

En la actualidad, según les han explicado los trabajadores municipales de jardinería y medio ambiente, estos depósitos han quedado como laderas sobre las que crece cada año un espeso herbazal de plantas anuales que en verano genera riesgo de incendio. Para evitarlo, los taludes deberían ser revegetados con plantas perennes que, al permanecer siempre verdes, reducirían esta posibilidad.

Por eso se han elegido una serie de plantas de carácter autóctono, adaptadas a las condiciones del suelo, que exigen de pocos cuidados y no necesitan riego. Se trata de plantas perennes de las especies halonitrófilas que suelen formar espesos matorrales en otros terrenos de este tipo en el entorno de Guadix, como el salao blanco (Atriplex halimus y Atriplex rosea) o el salao negro (Salsola verticilata). Para dotar a la plantación de una mayor estética se plantarán también tomillos (Thymus sp) y se aprovecha el contraste de verdes entre las dos plantas (verde claro plateado en un caso y verde oscuro en el otro), y el color rojo-rosado de las sámaras de los frutos del salao negro, muy vistosas en otoño. Asimismo, los alumnos del IES Padre Poveda han plantado junto al alcalde un almez (“Celtis australis”), que se caracteriza por tener una madera dúctil y de gran calidad.

Más información sobre el Día del Árbol
La idea de establecer tal día tiene una larga historia. La Asamblea General de la Confederación Europea de la Agricultura hizo una recomendación a este respecto en 1971. En noviembre de 1971, en su 16.° período de sesiones, la Conferencia de la FAO recomendó a la Organización que apoyara la creación de un Día Forestal Mundial, y cooperara de forma adecuada para alcanzar ese objetivo con los Estados Miembros. A pesar de que esta fue una recomendación muy progresista de la Conferencia y un paso decidido hacia el reconocimiento de las múltiples e importantes funciones que desempeñan los bosques, no se ha llegado a materializar por completo. Como resultado, en la actualidad no existe un día reconocido mundialmente para celebrar los bosques. Según diversas fuentes investigadas recientemente, en torno a unos 40 países celebran el día de los bosques bajo diferentes denominaciones tales como el Día Forestal (Forestry Day) o el Día del Árbol (Arbor Day o Tree Day), y las fechas también varían, dependiendo parcialmente del clima y del período de siembra adecuado; si bien, la fecha más común es el 21 de marzo. Se considera que dicho día corresponde al equinocio de otoño en el hemisferio sur y al equinocio de primavera en el hemisferio norte.

Fuente: http://www.fao.org/docrep/meeting/022/ma981s.pdf

Más información sobre el parque de El Vivero y su entorno
El Parque del Vivero se sitúa sobre una antigua escombrera que cubre lo que fue la confluencia entre el río Guadix y la rambla de Fiñana hasta los encauzamientos derivados de la inundación de 1973.
El área, en su conjunto, es muy interesante desde el punto de vista geomorfológico, ya que es muy ilustrativa respecto al papel de la red hidrográfica en la creación del paisaje que rodea el casco urbano accitano. En efecto, la rambla de Fiñana, que desemboca aquí de forma perpendicular al río, crea en él una gran curva que ha ido erosionando su margen izquierda dando lugar a un cantil (el tajo del Vivero).
En la zona del Vivero, este accidente topográfico marca una separación clara entre una zona baja, hoy ocupada por el área ajardinada, y una zona alta, poblada por un bosquete de pinos carrascos que linda con la antigua carretera de Almería
El nombre de “vivero” viene de su zona alta, en la que se situó durante la década de 1930 el vivero en el que se criaron buena parte de los plantones de pino carrasco utilizados en las “repoblaciones” realizadas en los bad-lands del valle del río Guadix (Coto del Marqués, ramblas de María, Baza y Fiñana, Zuchar, Marcoba, cueva del Periquito y Zalabí…). Por ello, esta área es relevante desde un punto de vista histórico.
Tras las inundaciones de 1973, las alamedas y sotos que ocupaban la zona baja quedaron arrasadas y el área pasó a ser utilizada como gravera, quedando un relieve irregular que propiciaba la aparición de charcas temporales y matorrales. Esta situación de “abandono” y su proximidad a la ciudad convirtieron al “Vivero”, junto al parque Municipal, el “Triángulo” y al “Huerto Calistro” en el escenario preferido para los juegos y correrías de los niños y adolescente de Guadix durante la década de 1970 y buena parte de la de 1980. Sin duda, esta importancia lúdica fue uno de los principales factores que incitaron al Ayuntamiento a transformarlo en un parque.
Junto al Parque del Vivero, existe otro elemento de interés: la rambla del Patrón. Este cauce atraviesa el casco urbano, con un tramo alto que recorre la zona de cuevas, separando el área de las Cueva de Medina y Ermita Nueva y acabando en el área del Puente Viejo, junto al Pino Córcoles. Desde ahí, recorre un túnel subterráneo a su paso junto al Mercadona y, finalmente, otro tramo encauzado a cielo abierto que constituye el límite norte del Parque del Vivero.
El tramo superior cuenta con el área de bosque de ribera mejor conservada del casco urbano de Guadix y su entorno. Este, junto a su morfología natural, con varios ensanches y curvas, constituyen el mejor mecanismo de prevención para atenuar la fuerza de eventuales crecidas en el cauce antes de que penetre en su tramo urbano subterráneo. Este tramo acaba junto a uno de los árboles más valiosos de la ciudad, el Pino Córcoles.

GABINETE DE PRENSA. AYUNTAMIENTO DE GUADIX.
21 de marzo de 2012.

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