El circuito, en el que Hamilton inició su carrera, sirve de ´plató´ para numerosas campañas publicitarias que benefician económicamente a la comarca
IRENE MOLERO Sentirse todo un campeón a manos de un Ferrari conduciendo a más de 240 kilómetros por hora es una experiencia única que, sin embargo, puede estar al alcance de cualquier apasionado del mundo del motor sin salir de la provincia. Así, el circuito de Guadix, llamado también ´La catedral del motor´, permite correr con total libertad, aprendiendo y, lo que es más importante, con todas las medidas de seguridad garantizadas.