Historia
En La Calahorra al igual que en el resto de municipios que conforman esta comarca se han encontrado restos del Neolítico, siendo necesario ofrecer una puesta a punto sobre la etapa prehistórica de la comarca. Posteriormente fue ocupado por los fenicios y se englobó en la antigua provincia Bastetana, siendo una de sus poblaciones la llamada Arcilacis, que posteriormente derivó en Alcala Horra o Castillo de las Peñas. Durante la dominación visigoda la Calahorra y los once castillos de la comarca pertenecían al Conde Don Julian, famoso por la leyenda como por su posible irrealidad. Las diferentes visicitudes que sufrió la España musulmana, se dejaron sentir en esta comarca, al igual que la guerra de Granada. Así, el 30 de Diciembre de 1489 el caudillo Cidi Yahya Alnayar entregó a los monarcas cristianos La Calahorra, así como otros lugares del Zenete. Los pobladores de este señorío se sublevaron en varias ocasiones contra los señores de La Calahorra. Al apoyar la insurrección de los moriscos sufrio una brutal represión y expulsión de buena parte de sus habitantes, debiendo ser repoblada con colonos de otras regiones españolas.
Lugares de interés
La Calahorra, entrada septentrional del Puerto de las Ragua, paso entre las dos laderas de Sierra Nevada, fue la capital del señorío de Don Rodrígo de Mendoza, marqués del Zenete, de quién deriva el nombre de la comarca. Es impresionante su castillo fortaleza renacentista, cuya construcción se remonta a principios del siglo XVI. Su aspecto externo, con un cubo en cada uno de sus cuatro ángulos y un cuerpo que sobresale hacia poniente, contrasta con los primores y filigranas del interior, que se conservan en muy buen estado. El patio central, de dos pisos de mármol, fue labrado por artistas italianos desplazados ex profeso. Este castillo fue la última fortaleza que se construyó en España, en una época donde las armas de fuego hacían inútiles este tipo de edificaciones. Además del castillo que puede visitarse, previo contacto con la familia que lo cuida pues es de propiedad privada, es digna de admirar por su particular torre y la heráldica que encierra en su interior, la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Anunciación, construida en 1546. Un paseo por este bellísimo pueblo granadino nos permitirá admirar notables edificaciones de solera y rancio abolengo. Peculiaridades En este pueblo se mantienen vivas curiosas tradiciones. En la madrugada del domingo de Resurrección, los jóvenes cualgan ramas de olivo en los balcones y ventanas de las mozas casaderas. Si estas mozas, han sido ñmalasñ durante el año, se les cuelga un hueso y si ya son novias, reciben un ramo de rosas. La noche de San Antón, tiene lugar el llamado Chisco, en el transcurso del cual se encienden hogueras alrededor de las cuales se bebe en comunidad, celebrándose a la mañana siguiente una procesión y carreras de bestias.
Fiestas
La Calahorra celebra sus fiestas patronales en mayo, en honor a San Gregorio. Sin embargo, es a principios de agosto cuando se celebran las principales fiestas, en homenaje al Santísimo Cristo de las Penas. Durante éstas últimas tiene lugar los tradicionales encierros y corridas de toros que caracterizan a los pueblos del Zenete. Igualmente se celebran las festividades de San Antón (17 de Enero) con el tradicional Chisco y San Marcos (25 de Abril), con reparto de roscos.
Gastronomía
DEL CASTILLO A LOS «SUSTENTOS». Siempre el castillo. Omnipresente en la comarca y cómo no en este pueblo, cuyo nombre, significa: Qalat al-Horra, «castillo de la señora». El asunto pudo haber influido en la cuestión intendente, bien sea como receptora de selectas viandas que llegaban para los señores del castillo, o como meros elaboradores de diferentes platos que los viajeros y gentes de paso enseñaron a los oriundos de la Alcalá Horra, que cuenta con notables edificios donde también se comía caliente. Hoy, las influencias morunas se podían descubrir en clásicos de la zona como es el Rin-Ran, del que advertimos que hay muchas variantes, me atrevería a decir que infinitas fórmulas que se disfrutan en también diferentes pueblos de los alrededores, junto a otros clásicos del entorno: migas, calderetas, ollas y pucheros. Cabe destacar entre sus platos las gachas, el Empedrado y uno de nombre peculiar conocido como Sustentos, del que damos la receta por singular y entonadora. Sustentos Patatas Costillas Ajos Chorizo Aceite de oliva virgen extra Agua Sal Harina Elaboración Se pelan y lavan un poco las patatas para que no se les vaya el almidón, y se cortan chascándolas al final. Se hace dados y en una olla con las costillas previamente rehogadas con los ajos y su poquito de chorizo se echan en el puchero y se dejan hacer como si fuese un estofado más. Cuando estén casi listo se le añade poco a poco la harina, moviéndose continuamente para que no se «engurulle».