El tiempo es un recurso fundamental en el mundo del montaje industrial: cada hora, cada minuto e incluso cada segundo cobran relevancia cuando se trata de ensamblar componentes. Este tiempo perdido se traduce en costes más altos y un gasto inútil de recursos, por lo que una de las prioridades de los trabajadores de este sector es reducir los tiempos sea como sea. Las herramientas eléctricas modernas se han convertido en una buena estrategia para este propósito: su rapidez y eficacia mejoran con creces los tiempos de montaje, el Santo Grial del sector. Pero, ¿cómo lo hacen?
Gracias a su potencia y precisión
Una de las características más significativas de las herramientas eléctricas modernas es su poder, su potencia. Toda esta potencia, que ya no tiene que generar el trabajador en sí, hace que el trabajo sea considerablemente más rápido y liviano. Lo mismo ocurre con la precisión, otra cualidad que caracteriza a las herramientas eléctricas. En el mundo del montaje, ser capaz de ajustar el torque y la velocidad del útil es extremadamente importante; esto evitará la deformación de las piezas y mejorará la consistencia del ensamblaje.
Gracias a que ya no tienen cables
Otra de las propiedades que caracterizan a las herramientas modernas es la falta de cables; las herramientas de hoy son, en su mayoría, inalámbricas. La gran mayoría de ellas funcionan gracias a baterías de litio, que además son mucho más respetuosas con el medioambiente que las alternativas que dependen de la gasolina.
Al no haber cables, los trabajadores pueden trabajar de forma mucho más cómoda y segura. Esto por consiguiente mejora aún más los tiempos de ensamblaje y, por tanto, aumenta la eficiencia de las empresas del sector.
Gracias a su comodidad
Otra de las características de las herramientas modernas empleadas en el sector del ensamblaje industrial, como puede ser un taladro eléctrico o una pistola de aire caliente, es la creciente ergonomía de las mismas. Las herramientas eléctricas son cada vez más ergonómicas; esto hace que sean mucho más fáciles y cómodas de usar para los profesionales, por tanto mejorando los tiempos (y seguramente la motivación de los profesionales).
Gracias a la posibilidad de monitorearlas de forma remota
Las herramientas más modernas están equipadas con tecnología que permite no sólo recoger datos de uso y desgaste, sino monitorear cómo está progresando el trabajo y predecir posibles fallas a corto y largo plazo. Esto hace que supervisores y trabajadores lo tengan mucho más fácil a la hora de prevenir cualquier incidente, y de monitorear el progreso real de su trabajo. Los datos recopilados pueden ser extremadamente valiosos a la hora de gestionar los activos y optimizar la producción futura.
En conclusión, las herramientas eléctricas modernas desempeñan un papel fundamental en el aumento de la eficiencia en el montaje industrial. Su potencia, precisión, ergonomía y capacidades de monitoreo hacen que sean herramientas indispensables en una amplia variedad de industrias.