DESCARGAR Libro de monasterios y conventos de Guadix de los siglos XVI y XVII de José Rivera

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Guadix a través de su historia ha contado con seis conventos: San Francisco, Santo Domingo, San Agustín, San José, vulgo San Diego, convento de Santiago y el de la Concepción.

Estos conventos fueron fundados entre el año 1498 y 1656. Por distintas razones, entre las que hay que destacar la invasión francesa de Guadix en 1810 y la desamortización de Mendizábal, los conventos de frailes desaparecieron quedando solo los conventos de Santiago y el de la Concepción.

Por el problema de la falta de vocaciones en 2018 las monjas de la Concepción abandonaron su convento y un año después lo hacían las clarisas del convento de Santiago.

Guadix se ha quedado sin conventos. En este libro se recoge la historia de los seis conventos, así como de sus iglesias, además del intento de fundación de otros dos conventos que no llegaron a realizarse.    

Tras las capitulaciones de 1489 entre el rey Zagal y los Reyes Católicos por las que Guadix entraba a formar parte del Reino de Castilla y aunque a los naturales se les concedió la seguridad de sus personas y bienes y la libertad de poder vivir como fieles seguidores de Mahoma.

Sin embargo, en muy poco tiempo, y siguiendo uno de los objetivos que se habían marcado los Reyes Católicos con el apoyo del papa Sixto IV que otorgó a la Guerra de Granada el carácter de cruzada.

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Se inició un proceso de evangelización para intentar, al principio por las buenas, la conversión al cristianismo de los musulmanes guadijeños.

Para conseguir este objetivo los Reyes requirieron la presencia en Guadix de las órdenes religiosas ya que por su formación teológica eran un
instrumento eficaz para la conversión de los “nuevos castellanos”
y para la atención espiritual de los que vinieran a repoblar Guadix, los cristianos viejos.

De esta forma ya a finales del s. XV les fue concedida autorización a la Orden franciscana para fundar su convento, lo mismo que a la Orden de Predicadores, los dominicos.

Aunque en principio se instalaron en unas casas en el interior de la “medina” (intramuros de la ciudad), sin embargo, al no disponer esta de espacios lo suficientemente amplios para edificar sus conventos, con su iglesia anexa y huerta para su abastecimiento, pidieron a los Monarcas les señalaran terreno extramuros de la ciudad para construir sus cenobios.

Así tanto a los franciscanos como a los dominicos se les dio huertas situadas fuera de las murallas.

Durante el s. XVI se establecerían en nuestra ciudad los agustinos, las clarisas, las concepcionistas, los jesuitas y los alcantarinos, además hubo intento de fundación de los carmelitas descalzos y de los capuchinos, aunque por razones que desconozco y que no he encontrado en ningún documento del Archivo Histórico Diocesano no se llevaron a efecto.

La influencia de los conventos en la sociedad accitana fue grande.

Por una parte, hacían todo lo posible por atraerse a la nobleza y ciudadanos importantes para que fundaran en sus iglesias capillas funerarias y contribuyeran económicamente a su edificación con donaciones que pudieran hacer al convento a su muerte y por otra estaban interesadas en atraer a las clases populares, con devociones a la Virgen o a los santos, y a las cofradías y hermandades.

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