El Ayuntamiento del Valle del Zalabí recibió un recibo telefónico de 3.047 euros porque el alcalde se conectó a Internet durante unas vacaciones en Turquía. Dice que es una «estafa» de la compañía. Pero no es su único ‘percance’ con el móvil
24.04.11 – 01:13 – QUICO CHIRINO |
La junta electoral de zona ha decidido esta semana suprimir los mítines durante la próxima campaña electoral en lugares tan emblemáticos como la plaza de Bib-Rambla. Donde hace treinta años la avioneta de la UCD esparció pasquines pidiendo la abstención en el referéndum de autonomía mientras Rafael Alberti soltaba su arenga a 4.000 personas, ese día que el poeta del Puerto acuñó su verso más prosaico: «Esto es una hijoputada».
Atrás quedan los mítines multitudinarios de Felipe y ‘Alfonso, dales caña’ en el Paseo del Salón. Incluso el reciente acto público de Mariano Rajoy en Atarfe, que congregó a 10.000 personas.
En la era del ‘facebook’ -donde se está en los sitios sin tener que estar presente- para llegar a un público tan amplio basta con enviar un sms, sin desgañitarse desde una tribuna.
Dicho y hecho. El alcalde del Valle del Zalabí, Manuel Aranda, cogió el celular, estrujó un poco la sintaxis para aprovechar los caracteres, y puso al tanto a los 2.300 vecinos del pueblo de las últimas gestiones: «Residencia de tercera edad del Valle del Zalabí. Los 6.500 metros para la residencia desde hoy ya son una realidad. Enhorabuena a todos. Informa Ayuntamiento Valle del Zalabí».
Pasó por alto que ya estaba abierta la precampaña y aquí se denuncia cualquier desliz. Eso y que entre sus contactos debe tener infiltrado a algún enemigo. El pasado miércoles, la junta electoral de Guadix multó al alcalde del Valle del Zalabí con 120 euros porque la ley prohíbe el «envío de sms que contenga alusiones a logros obtenidos por cualquier poder público».
Los partidos pactaron en Madrid unas nuevas reglas de juego para la campaña de las municipales, pero antes de que entrarán en funcionamiento ya se habían inventado la trampas.
El PP ha denunciado en la junta electoral a los candidatos socialistas o de IU en Alhendín, Maracena, Lanjarón, Deifontes, Baza, Guadix, Chauchina y Armilla. Por su parte, el Ayuntamiento armillero ha expedientado a UPyD por estampar -presuntamente- pegatinas en las papeleras del pueblo, una sanción que puede llegar hasta los 1.500 euros. Visto lo visto, resultan mucho más baratos los mensajes de móviles.
679 megas
El de la propaganda por sms no es el primer ‘percance’ que Manuel Aranda tiene con el teléfono. En estos momentos mantiene un pulso con una compañía por una factura disparatada.
En agosto llegó un recibo de 3.047 euros al Ayuntamiento del Valle del Zalabí por el consumo de las diez líneas de teléfono que tiene contratadas. En la factura aparecían 2.536 euros por concepto de ‘otros gastos’.
¿Qué gastos? El alcalde había pasado unos días en Turquía de vacaciones y se llevó su móvil corporativo para controlar desde la distancia lo que sucedía en el pueblo. En el listado de llamadas no figura nada especialmente excesivo, apenas una conferencia de 24 minutos y 48 segundos por importe de 31,20 euros el 12 de agosto. Pero sí aparecen desde otro número varias conexiones a Internet, con una descarga en esa factura de 679 megas. Aunque en teoría se trataba de una tarifa plana, la compañía ha cobrado 2.536 euros.
«Yo me metía todos los días a revisar los correos electrónicos y desviarlos al secretario del Ayuntamiento, no es que haya líneas eróticas -especifica-. Pero por esos seis días me quieren cobrar 2.500 euros», dice el alcalde, que admite que es una «bestialidad».
Según esta versión, le cobraron por conectarse a Internet, pero él no lo sabía. Manuel Aranda considera que ha sido víctima de una «estafa», porque no es consciente de haber contratado unas tarifas de ese tipo. «Los tres primeros días me conecté con un ‘pincho’ en el portátil, iba lentísimo. Después me cortaron el servicio y me llamó una operadora que me dijo que fuera de la Unión Europea no funcionaba. Me ofertó otro servicio y me comentó que me costaría 9 euros al mes», recuerda el alcalde.
Al juzgado
Eso sucedió en el mes de agosto. El 23 de marzo, el Ayuntamiento del Valle del Zalabí ha solicitado al juzgado una documentación para poder plantear un pleito a la compañía telefónica por «violación de derechos del consumidor». El abogado pide el contrato firmado entre el Consistorio y la empresa donde aparezcan las tarifas por acceder a Internet fuera de España, así como que se detallen las conexiones del recibo de marras.
La factura turca puede acabar en el juzgado. Y ya se ha metido en la precampaña.
O mucho cambian las cosas o la junta electoral no va a tener manos para resolver tantas trampas.
